Cuando todavia no se disipa la sorpresa de la sorprendente Raspberry Pi, ya aparece en el horizonte la nueva generación de computadores embebidos miniatura de propósito general.
Se trata en este caso del "Black Swift" producido por un talentoso equipo de origen ruso.
Como en el caso del Raspberry la innovación no proviene de los laboratorios de compañias grandes sinó de un equipo pequeño, el financiamiento viene además del original concepto de "crowdfunding" implementado entre otros por el sitio KickStarter. Este mecanismo de financiamiento implica que alguien con una buena idea la propone, describiendola y estableciendo metas para los distintos logros asi como beneficios para quienes participen en el financiamiento de cada meta. La colección de fondos se realiza por un tiempo limitado. Algunos proyectos reciben un soporte sorprendentemente rápido o sorprendentemente masivo (o ambos).
El BlackSwift (especie de pájaro migratorio que vive predominantemente en América del Norte) es un computador de propósito general, realizado bajo arquitectura ARM embebida, con solo el procesador y memoria principal en la placa. Su expansión se produce mediante un bus GPIO y dos puertos mini-USB (uno para energía y otro para periféricos). No tiene conectividad Ethernet o WiFi pero puede ser proporcionada por un adaptador externo.
Este tipo de procesadores no está pensado para que corramos en ellos una planilla Excel, que revisemos nuestro correo o que naveguemos Internet con ellos (aunque con algún esfuerzo e ingenio sería posible); sino para, en cambio, ser el objeto mismo de nuestra experimentación como parte de nuestros equipos de radio. La plataforma Raspberry Pi puede ser utilizada directamente como transceiver QRPp para generar señales en una variedad de modos digitales y en FM, con las adaptaciones del caso no veo porque no se pueda hacer con esta plataforma.
La tendencia de asociar este tipo de procesadores para implementar transceivers mediante técnicas SDR es irrefrenable y creo que configurarán la forma de hacer radio en los años que vienen.
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