Para los cultores del packet radio que en alguna oportunidad intentaron experimentar con TCP/IP montado sobre AX.25 siempre resultó una frustración las limitaciones que imponía primariamente la velocidad (1200 o 9600 bps) y en segunda medida el protocolo AX.25 mismo, al menos en su version 1. No hubo nunca redes que realmente aprovecharan las ventajas de la versión 2 del protocolo, en particular de packets mayores a 256 bytes.
La red packet ha languidecido en la última década hasta llegar al punto hoy de ser prácticamente inexistente, con excepción de algun BBS todavia en funcionamiento mas por nostalgia que por uso y de la relativamente modesta pero aun útil infraestrctura de APRS.
El uso de TCP/IP ha evolucionado mientras tanto para que sea dificil navegarlo con velocidades relativamente bajas; aún 512 Kbps es una velocidad donde no es cómodo navegar, siendo velocidades superiores al 1 Mbps mas la norma que la excepción en estos dias.
Como un hecho que pocos conocen la red packet tiene un dominio en Internet, el ampr.org y un subnet clase A (el 44.0.0.0/255.0.0.0) que es administrado globalmente como un dominio no ruteable y no conectado aunque un gateway en ucsd.edu resuelve su DNS y bajo ciertas condiciones rutea desde y hacia Internet. Cada geografía tiene un coordinador que administra un subnet Clase B de esa alocación, la que nos corresponde en Argentina es la 44.153.0.0/255.255.0.0; la que a su vez se separa en subnet Clase C con un criterio geográfico.
Recientemente se está produciendo una corriente de desplegar infraestructuras de alta velocidad (11 Mbps o superiores) en bandas de aficionado de microndas basada en equipos comerciales modificados que recibe el nombre de HSMM (High Speed Multi Media network) o Hinternet (Ham Internet).
Esto por su parte genera la reacción de aggiornar la infraestructura de ruteo con internet, especificamente el gateway en ucsd.edu para nivelarlo a los tiempos que corren.
Junto con un equipo de "vagos y mal entretenido" hemos pedido y obtenido 3 subnet clase C (256 direcciones cada uno) localizados en Córdoba (cor.ampr.org), Mar del Plata (mdq.ampr.org) y La Plata (lpg.ampr.org) destinados a realizar experimentos con estas tecnologías que ya son accesibles desde Internet (probar ping router.cor.ampr.org) aunque aun no tienen infraestructura desplegada que responda. No hay un plan claro y no es posible determinar a que velocidad progresará el experimento y que grado de avances producirá y por cierto cual será su resultado; el tiempo de todos los participantes es muy limitado y son muchos los aspectos a cubrir.
Por lo pronto hay que trabajar sobre equipo comercial que opere en 5 GHz (hay una idea de hacer algunas pruebas en 2.4 GHz como banda no licenciada, pero esto requerirá en algún momento una autorización de la CNC) para lo cual hay que buscar formas de aumentar potencia y alcance respecto a un router doméstico normal.
Por otra parte el tipo de ruteo necesario exige trabajar con el firmware de los routers comerciales para agregar opciones de tunelización IP-IP, protocolos especiales de RIP y quizás algun esquema especial de extensión de rango); para ello hay que partir de desarrollos como dd-wrt u Openwrt y modificar su configuración, los módulos que están activos e inclusive agregarle extensiones "custom".
Por ultimo hay que trabajar en conectar y rutear los tres LANs (o MANs en realidad) para que eventualmente puedan engancharse con el gateway en USA que los haga visibles en Internet; para ello hay que establecer túneles IP-IP.
Mucho trabajo, cansa solamente enumerarlo, mas aun pensar en lo que falta y ni que hablar de hacerlo.
Mas allá de lo interesante (o divertido) que sea jugar con estas cosas hay que pensar también en encontrar una buena respuesta a la pregunta "¿para que?".
En este momento la respuesta es obvia... "porque es divertido", pero cuando acabe la experimentación quedará aun la pregunta de que uso se le puede dar a una infraestructura asi.
Obviamente si bien puede usarse para navegar por Internet carece de sentido con ese propósito, excepto como muy secundario. El real desafío de una infraestructura de este tipo es ver si en ella florecen aplicaciones propias de aficionados, como en su momento lo fueron el DX-Cluster o APRS, o implementaciones originales de tecnologías existentes para usos de radioaficionados.
¿Carecemos de ideas o simplemente hay que crear el marco para que se implementen? No hay forma de saberlo hasta que probemos.
Por lo pronto estaremos construyendo una maceta, luego el tiempo dirá que clase de flor puede aparecer ahi.
Muy interesante Pedro, 73
ResponderEliminarGustavo LU8WFY